viernes, 1 de febrero de 2008

Broza sin fronteras

Por la mañana, de entrevista, y por la noche en el concierto, pude constatar varias cosas de David Broza: que no aparenta los 53 años que tiene, que toda la fuerza que despliega en sus conciertos se vuelve suave amabilidad al bajar del escenario, que en Oriente Medio hacen falta muchos como él. Canta en tres idiomas, adora a Serrat y a Manzanita (incluso me tocó en medio de la charla su Ramito de violetas en hebreo), a Bob Dylan y a Camarón. Hace un par de días apenas, se me caía el alma a los pies leyendo sobre el informe de la Comisión Winograd sobre la guerra israelí contra Hezbolá. A veces, nos cuesta entender la maraña de información que nos llega de esa zona, pero hoy Broza me ha explicado de un modo muy didáctico una clave para la resolución de los conflictos palestino-israelíes: "Cuando salgo de Tel Aviv y voy a la parte oriental de Jerusalem, no siento que esté cruzando ninguna línea, no siento que me estoy metiendo en un mundo que no es el mío y que se llama palestino. Es la continuación normal de mi día, me encuentro con mis amigos, nos tomamos un café, hacemos una canción". Menos balas. Menos muros. Más cafés. Más canciones.
Nota.- Es el cuarto candidato a los Goya que, de pura casualidad, entrevisto esta semana. Los otros han sido Abdelatif Hwidar (Mejor corto de ficción), Lucina Gil (Mejor corto documental) e Ignacio Martínez de Pisón (Mejor guión original). Este año sí que veré la gala. Suerte para todos.

1 comentario:

Alejandro Luque dijo...

La entrevista:

http://www.mediterraneosur.es/prensa/broza_david.html